Lo prohibido.

No sé, quizás no entendiste, la mente habla lo que el corazón le dicte. Quizás el amor no te sigue, y de mí te olvides tan fácil como el ayer. Solo sé que es la distancia traicionera, dejándonos a la espera de saciar la sed. Ayer mi querer te brindé sin daño, ni prejuicios, creíste jugaba sucio ese fue tu gran error. La vida me enseñó a amar sin consecuencias, construir una grandeza, ser el sueño de alguien, para despertar a su lado y recordarle todos los días cuanto la amo. El silencio hace milagros, para poder comer a diario y así besar tus labios, sin que te sientas sola. Serás la ola que salpica mi cara, serás lo que quieras, pero jamás serás mi amada. Eso lo sé y destruye mi alma y si por casualidad te alcanza una gota de rocío, es una lágrima que va tras de ti, buscando lo prohibido.